ATOS DESTROZADO AL IMPACTARSE CONTRA CAMIONETA
Al menos ocho personas huyeron de una camioneta, incluyendo el guiador, que por no respetar una señal de alto provocó un fuerte accidente de tránsito anoche en la calle 57-A con 22 de la colonia Esperanza. El otro auto involucrado en el percance fue un Atos que quedó destrozado.
Los hechos ocurrieron cuando el conductor de la camioneta de placas YZA4365 circulaba sobre la calle 57-A, acompañado de varias personas más, y en la esquina con la calle 22 no respetó la señal de alto, invadió la preferencia y fue chocado de lado derecho delantero por un Atos de matrícula ZAB118B que iba de sur a norte con paso libre.
El fuerte golpe dejó deshecho al Atos, mismo que quedó atravesado en el cruce, en tanto que la camioneta siguió su marcha, se subió a la banqueta del lado izquierdo, chocó contra una pared y avanzó unos metros más hasta detenerse. Acto seguido, todos sus ocupantes bajaron y se dieron a la fuga, abandonando la escena de los hechos.
Arribaron agentes de la SSP que luego pidieron la atención de peritos de tránsito a fin de tomar nota y deslindar responsabilidades, remolcándose ambos vehículos al corralón. Ya acudirá alguien a reclamar la camioneta y así se podrá cobrarle todos los destrozos que provocó.
Los hechos ocurrieron cuando el conductor de la camioneta de placas YZA4365 circulaba sobre la calle 57-A, acompañado de varias personas más, y en la esquina con la calle 22 no respetó la señal de alto, invadió la preferencia y fue chocado de lado derecho delantero por un Atos de matrícula ZAB118B que iba de sur a norte con paso libre.
El fuerte golpe dejó deshecho al Atos, mismo que quedó atravesado en el cruce, en tanto que la camioneta siguió su marcha, se subió a la banqueta del lado izquierdo, chocó contra una pared y avanzó unos metros más hasta detenerse. Acto seguido, todos sus ocupantes bajaron y se dieron a la fuga, abandonando la escena de los hechos.
Arribaron agentes de la SSP que luego pidieron la atención de peritos de tránsito a fin de tomar nota y deslindar responsabilidades, remolcándose ambos vehículos al corralón. Ya acudirá alguien a reclamar la camioneta y así se podrá cobrarle todos los destrozos que provocó.
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